HISTORIAS EN LIENZOS

Victoria Hernández es una artista que, a través del tiempo y las adversidades, ha logrado encontrar en el arte una forma de resistencia y expresión. Nacida en Maracaibo, Venezuela, su conexión con las artes comenzó a los 13 años en el mundo del teatro, una disciplina que no solo le permitió desarrollarse como artista, sino también entender el poder transformador de las historias. Durante su formación en la Escuela de Bellas Artes de su ciudad natal, presentó diversas obras teatrales para públicos de todas las edades, lo que consolidó su amor por la creación y la interpretación. Esta etapa en el teatro fue fundamental, pues le permitió entender la importancia de la narrativa visual y emocional, algo que hoy impregna sus obras pictóricas.

Su paso por Caracas, donde recibió una beca universitaria gracias a su trabajo en el teatro, marcó un cambio decisivo en su vida. En la capital, profundizó sus estudios de actuación en institutos privados, lo que la llevó a formar una visión más amplia y enriquecida del arte como herramienta de cambio y reflexión. Sin embargo, su carrera se vio abruptamente interrumpida por los intensos y dramáticos sucesos políticos que sacudieron a Venezuela. Las manifestaciones, protestas y la creciente represión le generaron una constante presión, y el clima de inseguridad en el país llegó a un punto extremo cuando un atentado contra el medio en el que trabajaba terminó con la explosión de su vehículo, un acto que no solo afectó su seguridad, sino que también marcó el fin de una etapa de su vida en Venezuela.

A raíz de este evento, Victoria decidió emigrar a México, buscando no solo un lugar más seguro, sino también un espacio en el que pudiera reconstruir su vida y su arte. Fue en México donde encontró un hogar y comenzó a adentrarse en el mundo de la pintura, un campo en el que había sentido siempre una conexión profunda, pero al que no había tenido la oportunidad de dedicarse por completo. En la Escuela de Arte, inició su formación técnica en pintura, donde desarrolló una nueva comprensión del lienzo como medio para contar historias y expresar emociones. Fue allí donde, rodeada de mentores y compañeros de creación, dio forma a su estilo, utilizando técnicas mixtas, surrealismo y collage para plasmar las complejas realidades que vivió como migrante y mujer.

En sus obras, Victoria se sumerge en los temas de la migración, la mujer y la lucha contra las enfermedades mentales. Cada uno de sus cuadros es un relato visual, un testimonio de las luchas invisibles que atraviesan muchas personas en el mundo. La migración, con sus desafíos emocionales y físicos, la mujer, con su constante batalla por el reconocimiento y la igualdad, y las enfermedades mentales, que siguen siendo un tema poco abordado, se convierten en los hilos conductores de su arte. En sus trabajos, fusiona lo surreal y lo simbólico para hablar de la fragilidad humana y la fortaleza que se necesita para resistir los embates de la vida.

En los últimos cinco años,  Victoria ha participado en diversas exposiciones colectivas, donde ha mostrado su visión única y profunda sobre estos temas. Su arte no solo busca provocar una reflexión sobre las realidades sociales y personales, sino también generar empatía y apertura hacia historias que, a menudo, permanecen ocultas. Cada pincelada y cada collage en sus obras es una invitación a cuestionar, a sentir y a entender la humanidad detrás de las luchas cotidianas sin pretensiones ni ostentaciones.

Con una mirada firme hacia el futuro, Victoria Hernández continúa su camino en el arte, explorando nuevos medios y técnicas, siempre con la intención de seguir creando obras que no solo sean visualmente impactantes, sino también profundamente significativas, para que cada persona que las observe se sienta tocada y entendida.